Se suele decir que el psicoanálisis es sociología de baratillo pero buena literatura. Más que por lo lejanas que sienten algunos pensadores contemporáneos las teorías de Sigmund Freud y sus aprendices —que también—, es habitual que la disciplina psicoanalítica se despache así por su profusión de mitos, metáforas e imágenes literarias. De todas ellas, quizá la que más ha calado en la cultura sea la de Edipo, el protagonista de la tragedia de Sófocles, y su famoso complejo. Por si no te has leído el texto del poeta heleno —hazlo, es lo más parecido a un neo noir de David Fincher que encontrarás—, no tienes muy claro por qué Freud lo recupera o simplemente quieres indagar más en tus fetiches, te explicamos qué es el complejo de Edipo.

Complejo de Edipo: qué es, en qué consiste, diagnóstico...

Edipo es un personaje mitológico de la Grecia clásica plasmado por Sófocles en la tragedia Edipo Rey. Hijo de Layo y Yocasta, los reyes de Tebas, el niño sufre nada más nacer el primero de muchos reveses del destino: el oráculo advierte a Layo de que Edipo lo asesinará, así que el padre lo manda abandonar al nacer. Al sirviente encargado del marrón se le remueve la conciencia y, en lugar de eso, se lo entrega a un pastor, que a su vez lo da en adopción a los reyes de Corinto, quienes lo crían como hijo suyo.

Ya de joven, Edipo escucha unos rumores que lo llevan a consultar al oráculo de Delfos, quien le revela su fatum o destino ineludible: matar a su propio padre y casarse con su madre. Para evitarlo, Edipo pone tierra de por medio y se marcha de Corinto, creyendo que así protegerá a sus padres de la profecía, sin saber que ellos no son sus progenitores biológicos. El joven parte de viaje y, de camino, tiene una trifulca con Layo, su verdadero padre, donde lo mata. El sino lo lleva a una Tebas huérfana de rey y allí, después de que Edipo resuelva un complejo enigma y salve la ciudad, lo coronan como monarca y lo casan con Yocasta, con quien tiene cuatro hijos.

Al final, la verdad se descubre. Yocasta, al descubrir que Edipo es su hijo desaparecido se suicida, y el propio Edipo, incapaz de soportar el horror que le producen el incesto y el parricidio combinados, se saca los ojos como en ese meme tan gracioso de Mickey Mouse y abandona Tebas para vagar, ciego y deshonrado, por toda Grecia.

mickey mouse meme ojos
Pinterest/

No te haces una idea del pringue que alguien tan retorcido como Sigmund Freud es capaz de sacarle a una historia como esta. El complejo de Edipo aparece mencionado por primera vez en la obra del influyente médico austriaco en 1910 y designa un conjunto de sentimientos propios de la infancia en los que coinciden de forma simultánea y ambivalente los deseos amorosos y hostiles hacia los padres. Así, este complejo edípico describiría un deseo inconsciente del niño de mantener una relación sexual incestuosa con el progenitor del sexo contrario y de eliminar al progenitor de su mismo sexo.

el complejo de edipo en los simpson
Disney+
Obviamente también está explicado en Los Simpson, como todo en la vida.

El complejo edípico es uno de los conceptos más importantes del psicoanálisis, si no la piedra angular de toda la doctrina freudiana, tanto a nivel teórico e interpretativo como construcción metafórica aplicable a casos clínicos. Además de esa primera versión, Freud concibe también una configuración invertida del fenómeno, el complejo de Edipo negativo, que implicaría el deseo por el progenitor del mismo sexo y el odio o la rivalidad hacia el progenitor del sexo opuesto. En resumen:

  • Complejo de Edipo positivo: niño desea a la madre y odia al padre (o al revés).
  • Complejo de Edipo negativo: niño desea al padre y odia a la madre (o al revés).

Según la teoría freudiana, el complejo de Edipo se manifestaría durante la llamada fase fálica o pregenital del desarrollo psicosexual, después de la fase anal (cuando un niño aprende a controlar sus esfínteres y autorregularse) y antes de la fase de latencia (en la que comenzaría la formación de la sexualidad adulta). Esto es, entre los tres y los seis años de edad, mientras el infante empieza a desarrollar curiosidad por sus órganos genitales y va tomando consciencia de las diferencias entre los sexos.

Según argumenta Freud en Tótem y tabú, el complejo de Edipo constituiría la condición central de lo que describe como totemismo —las relaciones de deseo, poder y culpa que proscriben el asesinato del padre y el incesto con la madre en cualquier cultura humana— y sería, por tanto, un complejo universal, aplicable y fundante en cualquier sociedad. Esto es ampliamente discutible, aunque es cierto que el mito dramatizado por Sófocles y la lectura que de él hizo Freud en el siglo XX se han vuelto tópicos esenciales de la cultura occidental. ¿Has visto Oldboy? Pues eso. El simpático señor esloveno y barbudo que ves en la foto de más abajo, el filósofo Slavoj Žižek, es famoso, entre otras cosas, por su enfermiza obsesión con el complejo de Edipo y por lo mucho que disfruta encontrándolo en absolutamente todas partes.

slavoj zizek complejo de edipo
Matt Carr

Según el autor, esta conflictiva edípica tendría que ser resuelta para que el sujeto pueda desarrollar plenamente su sexualidad. De acuerdo con Freud, el complejo de castración sacaría a un niño del conflicto edípico por temor al cercenamiento del pene, pero, por el contrario, empujaría a una niña hacia él, buscando en el padre el falo faltante en la madre. Como ves, para Freud el complejo de Edipo no es simétrico: no aplica por igual en todos los sexos.

De hecho, existe una teoría análoga, el complejo de Electra, desarrollada por Carl Jung, que describiría la atracción sexual inconsciente de una niña hacia su padre (es decir, un complejo de Edipo positivo en un infante sin falo). Sin embargo, Freud nunca aceptó la idea de Jung.