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En verano se dan situaciones extravagantes. Histórico fue el agosto en el que Leo Messi envió un burofax al Barça pidiendo su salida y no menos bombazo resultó cuando se confirmó la misma al verano siguiente. Pues eso es una anécdota comparado con que yo me ponga a hacer una selección de las mejores cervezas disponibles en España a un simple cliqueo de enlace.
Es una época en la que la apatía y ausencia del personal dan mucho para estas anomalías, así es que ahí vamos con un listado de cervezas que un winelover no se puede perder y que, además, le dejan la reputación intacta. De hecho, son referencias que dan cierto caché a vuestro Instagram, en plan yo también se jugar a esto de irme de cerves de afterwork y cañeo, pero me voy con ESTAS cerves.
Esto es, bebo como vosotros, pero ni por un momento penséis que bebo lo que vosotros. Ese es el mensaje. Que empiece la fiesta.
1. Schneider Weisse, Tap 5, Meine Hopfen-Weisse, Alemania
1,87 euros la botella de 50 cl.
Me encantan las cervezas de trigo, para mí sería el epítome del fresqueo en cervezas dado que me entran con una facilidad asombrosa. Pues de todas, la que más me gusta es esta que además es bastante fácil de encontrar.
Muy divertido, mucho más que beberlas en Berlín, que en verano está plagado de avispas, la puta ciudad esa.
Schneider Weisse Tap 5 Meine Hopfen-Weisse
2. Vinohradská 11, Pilsner Lager, República Checa
2,20 euros la lata de 33 cl.
La República Checa es la tierra de la Pilsner, cervezas de fácil trago dado su cuerpo ligero que han triunfado bastante en todo el mundo y en donde la Pilsner Urquell se ha granjeado cierta fama, al punto de que, en Madrid por ejemplo, existen bares con grifo de esta cerveza.
Y no está nada mal, por no hablar de que tiene versiones de ultra culto como la Pilsner Urquell Nefiltrovany tan buena como unicornio, pero, como yo voy de guay todo el rato, la que os recomiendo es esta disponible a través de la web de la propia cervecera. Comprad 50 o así por aquello de amortizar los gastos de envío. Seguro que les hace mucha ilusión.
3. Cerveza trapense Orval, Bélgica
2,54 euros la botella de 33 cl.
A mí esta gente me hace mucha gracia. Orval es la cerveza rubia trapense que se elabora en el Monasterio del mismo que nombre que si bien data, al menos como construcción primaria, de nada menos que el año 1070, no es hasta 1931 cuando consta que pusieran su primera botella a la venta. Yo he visitado el monasterio y es un emplazamiento de lo más evocador, de esos que los magufos catalogarían como lugar de poder.
Solo hacen esta referencia, o sea que no vayáis ahí queriendo beber vuestras chorradas, lo que sí podéis hacer es maridar la cerveza con queso, pan y chocolate que también producen allí mismo los propios monjes trapenses. Cerveza, queso, pan y chocolate. A poco que alguien lleve porros ya tenemos montado el finde.
cerveza Cerveza Trapense Orval
4. Trappistes Rochefort 10, Quadrupel, Bélgica
2,65 euros la botella de 33 cl.
Rochefort 10 es la cerveza de más alta graduación de esta gente que lleva activa desde el S.XVI y a la que casi se lleva por delante la Revolución Francesa. Aún así, esta referencia en concreto se elabora desde 1952 y es realmente contundente.
Desde luego con los 11,3º que tiene no es idónea para irse de cerves con ella, lo mejor es metérsela con algún plato mediante. Unas pochas a la riojana, por ejemplo. Por decir algo así sencillo.
rochefort Trappistes Rochefort 10
5. Robinsons Trooper, Premium British Beer, Inglaterra
2,89 euros la botella de 33 cl.
A ver, esta cerveza, estando buena, tampoco es que sea la hostia.
Por lo que son sus características organolépticas no pinta nada en esta selección, pero es que detrás de esta referencia está Iron Maiden, y no solo poniendo la dirección de arte, ya icónica, de la banda al servicio de la etiqueta de la botella, no. Es Bruce Dickinson el que se ha involucrado especialmente en su producción, asociándose con la familia Robinsons que llevan ya un rato elaborando cervezas, en concreto, desde 1848. Desde luego, un completista del mítico grupo no se la debería perder.
Cervezas inglesas / británicas Robinsons Trooper 33 cl
6. La Pirata, Black Block, España
3,25 euros la botella de 20 cl.
Cerveza negra catalana, también de alta graduación (11,2º), de una gente con una web cuidada y divertida de visitar. Haciéndolo hasta puedes aprender el origen de la palabra pirata. Muy útil.
Yo los conocí porque tienen bar en el barrio madrileño de Malasaña en donde lo pasé en grande y pude probar, entre otras muchas, esta Black Block, ya que tienen una gama de lo más versátil. Probadlas.
7. Porterhouse, Celebration, Stout, Irlanda
3,27 euros la botella de 33 cl.
Ya sé que pensar en cerveza negra irlandesa es pensar en Guinness, pero eso es para la gente así normal. Nosotros, los iniciados, vuelvo a insistir, huimos del mainstream por lo que si de una Stout irlandesa se trata le damos a la Porterhouse, en concreto a la Celebration que hizo eso mismo en 1999, año del lanzamiento de esta referencia, conmemorar el décimo aniversario de la fábrica.
Tiene 7º pero también es bastante densa, por lo que acompañada de un buen plato de carnaza va fenomenal. No me extraña que los cerveceros estén tan gordos.
8. Spencer Trappist Ale, Estados Unidos
4,23 euros la botella de 33 cl.
Atención que también hay monjes trapenses en Estados Unidos, en concreto estos se ubican en la abadía de Saint Joseph en Spencer, Massachusetts. Como a todos, les ha dado por hacer cerveza, y es que en algo hay que echar el día.
Aunque estamos ante una vocación tardía porque no llevan ni una década, empezaron en 2013, clavarlo lo han clavado porque vamos, catadas a ciegas, la ubicarías en el mismo Flandes. Presenta un gran equilibrio entre estructura y fluidez, muy buena.
9. Sierra Nevada, Big Foot, Barleywine, Estados Unidos
4,25 euros la botella de 35,5 cl.
No estamos en Granada si no en Estados Unidos con una cerveza que ellos consideran tan monstruosa que le han puesto el nombre de este animal cuyo hábitat son los programas de misterio, bueno y una serie noventera que me hacía gracia “Harry y los Henderson”.
El punto cómico y emocionante de una familia con niños conviviendo con una bestia depredadora de tres metros es innegable. Yo siempre la veía con la esperanza de que el mitológico animal se emborrachara o drogara por accidente y la liara arrancando la cabeza de alguno de la familia, o destrozando la casa y arrancando la cabeza de alguno de la familia, o comiéndose a la mascota familiar para luego arrancar la cabeza de alguno de la familia, pero, alerta spoiler, eso nunca llegó a ocurrir.
El caso es que estamos ante una Barleywine, estilo que no tiene nada de wine (de uva), pero que se caracteriza por presentar evoluciones en botella de gran nivel, esto es, son cervezas a las que les va bien unos años de guarda para que desarrollen todo su potencial. Su maridaje, obviamente, es con la serie comentada.
10. Wywar, 15 Years in Hell, India Pale Ale, Eslovaquia
4,71 euros la botella de 75 cl.
Para nuestros lectores más jóvenes os informo que antes existía un país llamado Checoslovaquia del que, básicamente, solo sabíamos de su existencia porque era la bandera bajo la que jugaba la tenista Martina Navratilova y luego ya ni eso (se nacionalizó estadounidense en 1975).
Checoslovaquia, el 1 de enero de 1993, se dividió en dos Estados, por un lado, la República Checa y por otro Eslovaquia. Del primero ya conocemos sus cervezas, su fútbol, su industria pornográfica, la belleza de Praga y la iglesia esa construida con huesos humanos, pero de Eslovaquia seguimos sin saber gran cosa salvo que Bratislava, ciudad diminuta pero preciosa, sirve de escenario para el secuestro y tortura de los incautos turistas de la película Hostel.
Bueno pues también elaboran cervezas de gran nivel de todo estilo y condición como esta Wiwar, una IPA amarga como la derrota del Barça ante el Eintracht de Frankfurt pero extrañamente disfrutable. Ahora mismo está agotada pero prueba a comprarla aquí.
11. Basqueland, Cold Open, Cold IPA, España
5,90 euros la lata de 44 cl.
Este es el proyecto de tres norteamericanos que se acabaron instalando en Hernani para hacer cervezas y seguro ponerse ciegos a comer bien. Estamos ante una IPA, pero fermentada con levadura lager las cuales fermentan a baja temperatura, supongo que de ahí lo de Cold.
Otra cosa no, pero los estadounidenses el naming lo dominan, tampoco se les da mal la cerveza. A mí esta me encanta.
12. Founders, Backwoods Bastard, Scotch Ale, Estados Unidos
6,86 euros la botella de 35,5 cl.
Ahora sí que nos sumergimos en la identidad americana gracias a una Scotch Ale nacionalizada, gracias al proceso de crianza en barrica de bourbon, que transforma este estilo escocés típicamente caramelizado en una cerveza ahumada y turbada muy como su país de procedencia.
Esta botella lo tiene todo, porque además de presentar una complejidad de clase mundial tiene una etiqueta de lo más instagrameable. Que me aspen si os la perdéis, maldita sea.
Founders Brewing Co. Founders Backwoods Bastard
13. Garage & Whiplash, Shoelaces, IPA, hispano-irlandesa
7,70 euros la lata de 44 cl.
Toca una singularidad y es que abordamos la cerveza fruto de la colaboración entre los catalanes Garage Beer y los irlandeses Whiplash (qué horrenda es la película homónima).
Estas dos comunidades tan festivas se han marcado una IPA de gran cuerpo y amargor elegante en una lata de cuidado y evocador diseño. Todo fenomenal.
14. Fourchette, trippel, Bélgica
11,14 euros la botella de 75 cl.
Realmente no es una cerveza si no un concepto de maridaje. Me explico. Fourchette es una referencia concebida para la Fourchette, un evento culinario situado en Gante en el que 11 cocineros estrella elaboran un menú de 5 platos y para los que la cervecera Van Steenberge, en la edición 2019, se decidió a lanzar esta referencia para acompañarlos.
Se dio tan bien el asunto que han decidido poner a la venta unas cuantas para que las podamos probar aquellos a los que nos pilla lejos esta bella ciudad flamenca. Y aquí os la traigo. De verdad que soy de las mejores personas vivas que existen.
15. Hanssens Schaerbeekse, Kriek, Bélgica
26 euros la botella de 75 cl.
Los de las cervezas, los que tampoco saben mucho, van de que son majos, divertidos e integradores en contraposición con el supuesto elitismo de los winelovers, pero luego resulta que también alcanzan altas cotas de idiocia. Una de ellas consiste en pensar que las cervezas de sabores son un producto menor, o sin pretensiones, cuando es una tradición centenaria en Bélgica.
Las hay realmente buenas, como luego vendrán referencias de Cantillon y 3 Fonteinen y no quiero repetir elaborador incluyo esta que, en este caso con la cereza, también da un nivelazo total. Ya ves tú, gente que desprecia una Kriek mientras se aprieta una Heineken. Eso lo han visto mis ojos y escuchado mis oídos.
Hanssens Schaerbeekse kriek 75cl
Hanssens Schaerbeekse kriek 75cl
16. Oerbier Reserva 2018, Francia
34 euros la botella de 75 cl.
Oerbier tiene historia trágica ya que en la II Guerra Mundial, habitantes del pueblo de Esen se escondieron en estas instalaciones para ponerse a salvo del ejército alemán. De nada sirvió, parece que en cuanto los descubrieron los aniquilaron allí mismo.
Quizás por esta desgracia, por exorcizarla, la imagen, diseño y actitud de Oerbier es de lo más festiva. A mí me parece la mejor manera de rendir homenaje a nuestros muertos, estar muy vivos. Esta Reserva no tengo ni idea de la razón por la que la han indicado así, en español, y no Reserve que sería en francés, es curioso porque lo pregunté en una visita que les hice, siendo su respuesta una carcajada y una invitación a probarla.
Muy generosa y divertida esta gente. Venga, a comprarla.
17. Mikkeller Tasting Box, Dinamarca
50,31 euros el pack
Los daneses también hacen buena cerveza, de entre todos los proyectos interesantes, destaca este por lo rápido de su crecimiento y su expansiva propuesta.
Copenhague lo tienen tomado, atención a su bar de Ramen, y hasta tienen un bar en Madrid. Por algo somos el epicentro, creo que universal, del cañeo y la libertad.
Si no vivís en la capital, cosa que no me entra en la cabeza, lo que os propongo es que os hagáis con este variadito pack para que podáis cogerle el aire a esta gente. Van un poco de guays, sí, pero esta selección da juego y os arregla la tarde.
18. Cantillon Bruocsella, Grand Cru, 2016, Bélgica
98 euros la botella de 75 cl.
Cantillon es la gran cerveza winelover, el gran mito cervecero dentro del culto iniciado de consumo de vino con pretensiones. Hasta el Master of Wine Pedro Ballesteros le dedicó un texto a su buhardilla, en donde hacen la crianza de sus creaciones, denominándola el 5º terroir.
Yo he tenido la suerte de probar todas en mis numerosas visitas a Bruselas ya que mi residencia no estaba nada lejos de esta gente, vamos que era como mi bar del barrio. He puesto la Bruocsella por poner alguna de sus gamas altas que aún no esté agotada, pero que vamos, a poco que os interese esto de beber tendréis que probarlas todas. Es lo que hay, así de exigente es la vida del iniciado.
cantillon Cantillon Bruocsella Grand Cru 2016 75cl
19. Chimay Azul, Grande Réserve, Bélgica
243,74 euros en formato de botella de 6 litros
Chimay, creo, la conoce todo el mundo, lo que no sé si ya el civil sabe que los grandes formatos de esta cerveza son de auténtico culto y, por tanto, de precio disparatado. La razón es de lo más curiosa y extravagante: lo suyo es beberse una de estas con muchos años de guarda, si puede ser que le caiga alguna década antes de abrirla, entonces el resultado es espectacular.
Una fiesta de complejidad y bebilidad, pero claro, para hacer este proceso bien hay que hacerse con una botella de cierto tamaño ya que la evolución del líquido en una de medio litro no es lo misma que en esta de 6 litros. Además, como podéis suponer, de estos tamaños, en los que el precio del vidrio también incrementa exponencialmente, lanzan muy pocas botellas al mercado.
Vamos que se dan varios factores winelover: escasez, botellón, guarda y singularidad. No me podéis negar que lo pasamos en grande.
20. 3 Fonteinen, Zenne y Frontera, Bélgica
1.255,43 euros la vertical completa
Lo mismo ya os pensabais que no iba a incluir alguna de mis barbaridades. Yo hasta con la cerveza os puedo arruinar.
Zenne y Frontera es el gran mito cervecero de 3 Fonteinen, elaboradora belga a la que le dio por hacer esta lambic envejecida en botas de Oloroso y PX, primero de Bodegas Tradición y ahora de Bodegas Fernández GAO.
La Batch 1 (primer lote) se cotiza a una auténtica salvajada y las demás, aunque por ahora, no alcanzan ese precio, lo harán porque también son objeto de especulación. Es cuestión de tiempo. Yo he probado todos los lotes y, para mí, es la mejor cerveza que existe.
No penséis en densidades profundas provocadas por la concentración de lo involucrado y el añejamiento jerezano, para nada. Es de lo más fluida manteniendo una complejidad asombrosa. No sabe ni a cerveza ni a Jerez. Realmente especial.
3 Fonteinen Zenne Y Frontera vertical
