Si tienes previsto viajar a Nueva York, y más si es tu primera vez, te van a poner la cabeza como un bombo. Tienes que ver esto, tienes que ver aquello, no vayas ahí que no merece la pena... La ciudad tiene el extraño poder de convertir en guía autorizado a todo el que la ha pisado una vez en la vida, aunque haya estado allí dos días. Nuestro consejo: no les hagas caso.

Nueva York es un destino con mil destinos dentro, una ciudad inabarcable y absolutamente llena de estímulos, que solo vas a conocer de verdad si vives en ella. Hemos tenido la suerte de poder disfrutarla durante una semana y no queremos caer en lo que acabamos de criticar. Por eso queremos que, lo que vas a leer a continuación, no te lo tomes como una guía de viajes. Lo único que pretendemos es darte seis ideas para disfrutar una ciudad muy disfrutable, pero que van más allá de lo que seguramente ya te han contado y que son compatibles con dedicarte a hacer el turista en Times Square o en Central Park que, por cierto, también molan un egg. Empezamos.

El Bronx. Sí, el Bronx

Olvídate de lo que te han contado las películas. El Bronx es gigante y, aunque alguna zona puede seguir siendo algo conflictiva, el resto no solo no son más peligrosas que cualquier otro barrio neoyorkino, sino que además merecen mucho la pena la visita. Te vamos a hablar en concreto de la conocida como Little Italy en Belmont.

una fachada de little italy en el bronx de nueva york
Álvaro Luengo
grafity en little italy, en el bronx de nueva york
Álvaro Luengo

No lo dudes y dedica una mañana a pasear por las calles de este barrio poco gentrificado, lleno de pequeños comercios, de vecinos que se saludan por las calles y de un ambiente amable y acogedor. Nosotros lo recorrimos acompañados de dos de los tres hermanos Ramírez, unos puertorriqueños que han montado la iniciativa From The Bronx, con la intención de mejorar la imagen del vecindario y dar a conocer su historia y su cultura propia, apoyando al comercio local, artistas, etc… Además, tienen una cervecería en el mercado del barrio, donde venden distintas variedades que ellos mismos elaboran. No dudes en ir a visitarles, su birra y su manera de entender la vida lo merecen, disfrutarás de un excelente zumo de cebada y de una excelente conversación. El bar se llama The Bronx Beer Hall y está en el Arthur Avenue Retail Market. Ellos nos llevaron a las tiendas que merecen una parada y nosotros, que somos buenas personas, las compartimos contigo. Si les ves, dales recuerdo de nuestra parte y seguro que te invitan a una cerveza. Apunta:

Joe´s Deli. Un lugar alucinante repleto de productos italianos gourmet: quesos, carne, aceite… Pero lo que de verdad es para flipar es el tipo que está tras la barra desde los 19 años (la tienda tiene más de 40), un aspirante a boxeador, cachondísimo, que hace la mejor mozzarella que hemos probado nunca. Si tienes suerte, lo pillarás elaborándola en directo. Acéptanos el consejo y no dejes de darle charla, el personaje es mejor que cualquiera de los protagonistas de tus series favoritas. (685 E 187th St, The Bronx, NY 10458)

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Borgatti´s Ravioli & Egg Noodles. Comandada por Chris Bogartti, un tendero encantador, es el lugar perfecto para comprar pasta artesanal de todas las formas, tamaños y colores. Él es la tercera generación de una estirpe dedicada en cuerpo y alma a elaborar esta delicia, siguiendo las recetas tradicionales de la familia. Entrar en esta pequeña tiendecita es como teletransportarte a Bolonia. No dejes de hacerlo, además, es buen sitio para llevar algún regalo a la familia y que después te inviten a comer. (632 E 187th St, The Bronx, NY 10458)

Full Moon Pizza. Procura que el momento de pasar por la puerta de este local te coincida con la hora de comer, porque según nos contaron los hermanos Ramírez, en todo Little Italy no vas a probar mejores pizzas que estas. Y, ciertamente, están de escándalo y a un precio muy razonable. El lugar, regentado desde hace muchos años por una familia de Salerno, es una maravillosa locura de gente entrando y saliendo, mesas sin mantel, familias, amigos, ruido… (600 E 187th St, The Bronx, NY 10458)

Calabria Pork Store. Amantes del embutido, este es vuestro paraíso. Jamón ibérico no tienen, pero tampoco les hace falta. Del techo cuelgan decenas de salamis, chorizos y demás, que aromatizan esta pequeña tienda en la que no vas a dejar de salivar. Y, aunque si estás de turismo nos tememos que no vas a poder cocinarlas, no dejes de echarle un ojo a sus salchichas frescas caseras, las tienen hasta con brócoli. (2338 Arthur Ave, The Bronx, NY 10458).

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Teitel Brothers. Esta tienda de ultramarinos es la herencia de dos hermanos austríacos judíos que llegaron a América hace más de un siglo. Aquí es donde compran los mejores productos italianos la mayoría de los restaurantes de la zona, porque tiene los precios más bajos de Little Italy. Si eres cocinillas, resérvate un ratito para dedicarle a este templo de la gastronomía italiana, donde podrás hacerte con un montón de excelentes productos como todo tipo de salsas para pasta a un precio de coña. (2372 Arthur Ave, The Bronx, NY 10458)

Cosenza's Fish Market. Una curiosísima pescadería repleta de marisco. Haz un alto en el camino y, en la propia puerta, podrás disfrutar de algunas delicias crudas como gambas, almejas… Zamparte una ostra en medio de una calle del Bronx te costará un dólar, pero créenos que realmente la experiencia no tiene precio. (2354 Arthur Ave, The Bronx, NY 10458)

Madonia Bakery. Si su horno lleva más de un siglo elaborando todo tipo de panes, bollos y dulces, por algo será. Aquí todo se hace a mano y todo está bueno pero, si tienes que elegir, tírate de cabeza a por sus cannolis, la familia propietaria es siciliana y podemos asegurarte que saben muy bien lo que hacen y lo que hacen sabe muy bien. Vas a flipar. (2348 Arthur Ave, The Bronx, NY 10458)

Jardín Botánico de Nueva York. Aprovecha tu paseo por Little Italy para, antes o después, hacer una visita al Jardín Botánico de Nueva York, al que puedes ir andando en un paseíto de un cuarto de hora, no te arrepentirás.

jardin botánico de nueva york
NYBG
Sí, my friend, esto es el Bronx.

Para empezar, se trata del botánico más grande de los EE.UU. Para continuar, en su interior podrás encontrar 50 jardines diferentes (de rosas, de magnolias…), un maravilloso invernadero de estilo victoriano, más de un millón de plantas, miles de árboles de más de 200 años… Y sí, también podrás darle de comer a las ardillas. Un auténtico paraíso en el que te darás cuenta hasta que punto el Bronx es muy diferente a lo que tenías en la cabeza. La entrada con acceso a todas las instalaciones cuesta 35 €. Tienes toda la info en www.nybg.org.

Nueva York desde el agua: otra perspectiva

Pasear por sus calles mola, pero ver la ciudad desde sus ríos es una experiencia increíble. Classic Harbor Line ofrece varios tipos de crucero diferentes aunque, si te gusta la arquitectura, el denominado “Paseo en Barco por la Arquitectura de NYC con narración en español” es una gozada. Durante dos horas y media, esta actividad se centra en disfrutar y aprender los secretos de algunos de sus edificios más emblemáticos, que se pueden ver desde los dos ríos que vertebran Nueva York: el Hudson y el East River. Una perspectiva diferente del skyline más famoso del mundo (también se pasa a los pies de la Estatua de la Libertad, Lady Liberty para los oriundos) en la que te explicarán mil curiosidades del urbanismo de una ciudad que solo puede crecer hacia el cielo (al loro que los constructores deben comprar el “espacio aéreo”), de los arquitectos que le han dado forma (varios nombres españoles), etc.

estatua de la libertad
Álvaro Luengo
nueva york desde el rio hudson
Álvaro Luengo

El precio por adulto es de 112 dólares (82 para los estudiantes) y puedes reservar desde su página web o llamando al teléfono (212) 627-1825. El paseo fluvial incluye además un refrigerio. Organízalo con tiempo porque no hay muchas salidas, las próximas son el sábado 29 de julio y el 5 de agosto, a las 10.45 h. Pero nos han chivado que habrá al menos tres excursiones al mes hasta el 30 de septiembre, para retomar la actividad en primavera de 2024.

Arte: de lo bueno, lo mejor... y gratuito

No sabemos cuándo tienes pensado viajar a Nueva York, pero en la galería de David Zwirner siempre vas a encontrar algo interesante. Para muestra, un botón, ni más ni menos que de Yayoi Kusama. Y es que la artista japonesa de 94 años expone hasta el 21 de julio algunas de sus últimas creaciones en la muestra Yayoi Kusama: I Spend Each Day Embracing Flowers. La exposición recoge 36 nuevas pinturas (la mayoría de ellas de su reciente serie Every Day I Pray For Love), una sala de espejos infinitos, esculturas de calabazas y flores… Una oportunidad perfecta para adentrarse en el personalísimo universo de una de las artistas contemporáneas más importantes del mundo.

flores de yayoi kusama
Kerry McFate

La exposición es gratuita y te recomendamos que vayas con tiempo, porque suele haber cola. Está abierta de martes a sábado de 10 de la mañana a seis de la tarde. La dirección: 519, 525 & 533 West 19th Street.

Centro Richard Gilder, mucho más que un museo

Del impresionante Museo Americano de Historia Natural seguramente ya te han hablado (y te habrán dicho eso de: “¿Has visto Noche en el Museo? Pues ese”), pero lo que a lo mejor no sabes es que ahora es el mejor momento para visitarlo. Porque, hace apenas un par de meses, acaba de abrir sus puertas en él el Centro Richard Gilder para la Ciencia, Educación e Innovación, una impresionante obra de arquitectura en cuyo interior se esconden numerosos tesoros.

gilder center nueva york
Iwan Baan
gilder center nueva york
Iwan Baan

De sus cinco pisos, tres están destinados a las exposiciones del enorme catálogo del museo: huellas de dinosaurio, fósiles, cuernos, piezas de cerámica, instrumentos astronómicos… Se puede visitar también un insectario con más de 18 especies vivas, exposiciones digitales, maquetas… y un mariposario donde, si tienes suerte, se te posará en la mano alguna de las 1000 que vuelan libres. El centro también cuenta con una fantástica experiencia inmersiva que explica cómo todos los seres vivos de la tierra están interconectados. Es imposible contarte aquí todo lo que este espacio ofrece, así que lo mejor es que bucees en su página web antes de ir. Y por cierto, está muy muy cerquita de Central Park, es buena opción combinar las dos visitas.

Visitar la casa de un magnate

Es un plan que te va a quitar poco más de una hora y, aunque es muy posible que no hayas oído hablar de esta biblioteca-museo, es muy interesante que le dediques un rato. Además está muy céntrica, en pleno corazón de Madison Avenue. Vista desde fuera, no despertará demasiado tus sentidos pero el interior es otra cosa. Te ponemos en contexto. Estamos en la que fue la casa del magnate J.P Morgan, uno de los banqueros más poderosos de la historia y uno de los responsables del auge económico de la ciudad de Nueva York. Además, fue coleccionista de arte, sobre todo medieval y renacentista, hasta hacerse con la mayor colección que existe fuera de Europa. Cuando falleció, su hijo consideró que aquellas joyas tenían que estar abiertas al público (gracias, friend), y así es como nace este museo, en la que antes fue su casa. Casoplón, para ser más exactos.

Podrás acceder a su despacho y también a su impresionante biblioteca que sus herederos han seguido alimentando y que, bajo un techo lleno de frescos y murales, esconde joyas como tres biblias de Gutemberg originales, manuscritos de Balzac o Dickens e incluso de Bob Dylan, dibujos de Leonardo Da Vinci, Picasso, Rembrandt… Un pasote. Está en 225 Madison Avenue con calle 36th.

A Broadway... ¡hay que ir!

No puedes ir a Nueva York sin dejarte caer por Broadway. Que sí, que puede parecer turistada, pero es un pasote. La oferta es gigante (nosotros tuvimos el privilegio de ver Moulin Rouge, súper recomendable) pero puedes elegir entre cualquiera de los mejores musicales del mundo: El Rey León, Chicago... Eso sí, las entradas no son baratas y, si te mueres de ganas por ver alguno en concreto, te recomendamos que vayas con tu entradita comprada, porque si no lo puedes tener difícil. Las puedes sacar desde la web de The Broadway Collection.

musical moulin rouge
Broadway Collection

Pero, si no tienes uno concreto entre ceja y ceja, atiende porque te puedes ahorrar hasta el 50% de la entrada. Y es que en las taquillas llamadas TKTS se venden localidades de última hora, para aquellas funciones que no han llenado (es un canal oficial, no te asustes). Para los musicales más célebres es muy difícil conseguir, pero tendrás un montón de opciones entre otras funciones que también te permitirán saborear el ambientillo de Broadway. La taquilla TKTS más famosa está en Times Square, pero casi seguro te vas a encontrar una buena cola. Tienen una segunda en Lincoln Center, donde seguramente te ahorres un buen rato. Infórmate en tdf.org.

No te olvides del CityPASS

Hasta ahora te hemos hablado de planes más o menos originales en Nueva York. Pero es que esta es una ciudad donde convertirse en el típico turista es maravilloso. ¿Y qué significa ser el típico turista? Significa subir al Empire State Building, ir a los pies de la Estatua de la Libertad, plantarte en medio de Times Square y mirar hacia arriba como Paco Martínez Soria, hacerte un picnic en Central Park... No te cortes y dedica un tiempo a practicar el turisteo máximo, que aquí hemos venido a jugar. Para esto, te recomendamos que te saques el llamado New York CityPASS.

Se trata de un pase combinado para disfrutar de cinco actividades en la ciudad (también hay una versión de tres si tu viaje es corto), con el que te ahorrarás hasta el 40% de la pasta que te costarían las entradas si las sacaras una a una y por tu cuenta. El Empire State y el Museo Americano de Historia Natural vienen por defecto y, después, puedes elegir otras tres entre estas opciones: plataforma de observación Top of the Rock (lo hemos hecho y es brutal), acceso en ferry a la Estatua de la Libertad y Ellis Island, acceso al monumento y museo del 11-S, cruceros turísticos Circle Line, entrada para el Museo Intrépido del Mar, el Aire y el Espacio o para el Guggenheim. El precio por adulto para disfrutar de cinco actividades es de 138 dólares, y puedes reservar tus entradas y tus horarios desde la propia aplicación. Tienes toda la info en www.citypass.com/new-york.

Así que ya sabes, y son palabras de Paul Auster y no nuestras: "Nueva York es un espacio inagotable, un laberinto de interminables pasos, y por muy lejos que vayas, por muy bien que llegues a conocer sus barrios y calles, siempre te deja la sensación de estar perdido". Y eso es lo bonito de viajar. Estás tardando.

Si quieres más info sobre la ciudad, en www.nyctourism.com tienes un montón de información práctica en castellano: alojamientos, restaurantes, calendario de actividades, sugerencias de planes...