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Ryan Gosling y Brad Pitt siempre han sido figuras similares, dos rubios de ojos azules y eternos abdominales que se ganaron antes el corazón del público que el aplauso de la crítica. El primero tiene ya 43 años, mientras que el segundo ha llegado a la barrera de los 60. Pero, por encima de eso, ambos cuentan con carreras extraordinarias, con películas de calidad, hits comerciales y auténticos fenómenos populares capaces de aunar crítica y público Son, dejémoslo claro, las estrellas masculinas por excelencia de sus respectivas generaciones.
Sin embargo, igual que tenemos claro su papel como números uno de su industria, o quizás por esa misma razón, su talento actoral siempre ha estado en entredicho. Está claro que tanto Gosling como Pitt son intérpretes de carisma más que de transformación. Como en el Hollywood clásico, ambos son estrellas que da gusto ver en cualquier papel siendo más ellos mismos, la gran figura del cine, que un personaje irreconocible. Son más Marcello Mastroianni o Cary Grant que Joaquin Phoenix o Peter Sellers; más Humphry Bogart que Marlon Brando.
Ignorando en la medida de lo posible lo estúpido que es que algunos sigan valorando las interpretaciones por el grado de transformación física o de voz del actor, lo cierto es que ninguno tiene la estantería llena de premios. Sí, Brad Pitt lo ganó todo por su rol secundario en Érase una vez en América, pero sus galardones siguen quedando muy atrás de lo que indica su cuenta bancaria. Y lo mismo podemos decir de un Ryan Gosling que este año lo rozó con su Ken de Barbie. Sin embargo, El especialista, el nuevo hit de Ryan Gosling que llega a los cines este 26 de abril, demuestra que el alumno le ha ganado al maestro.
La película dirigida por David Leitch nos cuenta la desdicha de un especialista de acción de cine en una aventura cómica y frenética en torno a un asesinato que le quieren encasquetar y un amor que ha de recuperar. Uno podría pensar que el hecho de que su personaje sea un especialista nos ha llevado a pensar en Brad Pitt, ya que este era su rol en Érase una vez en América, pero en realidad lo decimos por la anterior película de Leitch, Bullet Train.
El director de John Wick y Atómica hizo un giro hacia la comedia con Bullet Train, película en la que Brad Pitt se veía envuelto en un viaje en tren la mar de movidito. Como con El especialista, la película intentaba ser una perfecta comunión entre risas e impresionantes escenas de acción, pero parece ser que solo había un problema, el bueno de Brad.
No nos malinterpretéis, Brad Pitt hacia de Brad Pitt y eso podría ser suficiente. Sin embargo, Ryan Gosling no es tan igual a Pitt como nos había parecido y con El especialista nos ha demostrado por qué tiene más talento, más rango cómico. Hasta en una película cargada de personajes ridículos como Érase una vez en Hollywood, Brad Pitt siempre quedaba bien. En Bullet Train pasaba exactamente lo mismo, él nunca queda mal, nunca queda en ridículo, nunca permite que te ríes de él. Brad Pitt carece de algo que sí tenía DiCaprio en la cinta de Tarantino y que demuestra Ryan Gosling en El especialista como ya exhibió con su Ken en Barbie. Brad Pitt se ríe de los demás, mientras que Gosling empieza a ser todo un maestro de reírse de sí mismo.
Ser, a la vez, ridículo y el más molón de la clase es algo muy difícil. Pitt solo logra la segunda mientras que Gosling nos ha dejado claro con Barbie y El especialista (dos veces ya no es casualidad) que domina las dos facetas como el mejor. Cuando el protagonista es el centro de la comedia esta funciona mejor, es más empática y, perdón por la rima, también más simpática. Gosling, y su sentido del humor y del ridículo son las claves de por qué El especialista es tan divertida, mucho más que Bullet Train, y todo se lo debemos a que esta vez el doble de acción es Ryan Gosling y no Brad Pitt.
